Las mariposas negras no son tan comunes como las mariposas de otros colores. El significado simbólico de los mismos puede ser negativo o ser positivo.

Una mariposa negra generalmente se considera un símbolo de desgracia y un presagio de muerte en muchas culturas, mientras que, en otras, es un signo de cambio positivo.

La "muerte" indicada por la mariposa negra también puede interpretarse como una muerte de "algo" en lugar de una persona, como el final de una relación, un trabajo o incluso una idea o proyecto.

Un encuentro con una mariposa negra puede indicar que la persona está a punto de renacer o renovarse de alguna manera. A veces hay oscuridad antes del amanecer.

La mariposa negra también puede significar que está a punto de ocurrir un cambio en el poder. Ver una mariposa negra también puede ser una señal de que se producirá un cambio positivo en una situación presente.

En muchas partes del mundo, especialmente en América Central, Filipinas y China, las mariposas negras se consideran un símbolo de muerte. Las mariposas negras (y polillas) que se ven en interiores a menudo se consideran una advertencia de que pronto ocurrirá la muerte de alguien en la casa.

En la mitología azteca, la diosa guerrera “Itzpapalotl” se asocia con la mariposa negra e incluso se la conoce por su nombre como "la mariposa de obsidiana".

La mariposa negra representa el cambio, la transición, la libertad y el renacimiento. Las asociaciones con la muerte y la desgracia también pueden simbolizar la "muerte" de algo malo o negativo, o el final de las desgracias.

La mariposa en sí misma es un símbolo de muerte, renacimiento y transformación.

Si te visita una de ellas, no la mates, ellas son inofensivas.